Conozco a Colin desde que empezaron mis andaduras fotográficas en mi isla y es uno de mis personajes favoritos de la noche ibicenca. Puedo decir, con orgullo y mucho cariño, que es el negro más ibicenco que conozco, y con el que más me divierto en la pista de baile con su particular estilo de música. ¡Todo es posible que suene con Colin!
Me emitió una gran sonrisa cuando le propuse la entrevista y me dijo con un encantador español anglosajado “encantado”.